El adolescente Joe Kirby, fantaseando estar tras la pista de unos criminales, descubre para su gran asombro que todo se ha hecho realidad. Hace un recorrido por las historias de su propio cómic. Muy pronto se da cuenta de que las crónicas aventureras del cómic son usadas como una forma de comunicación entre un maestro criminal y su pandilla de ladrones.