Los criminales están secuestrando a mujeres jóvenes que son usadas para la venta en el mercado de esclavas sexuales. Maki, Reimi y Yuka son tres policías de tráfico que deciden ir de incógnito a un club de baile donde presuntamente han ocurrido muchos de esos secuestros para así poder atrapar al jefe de la mafia que está detrás de todo. Pero las cosas van mal y Yuka termina siendo secuestrada.