Don José es un buen padre de familia y empleado modelo. Él vive en su casa como un rey, su esposa e hijos sus más felices súbditos; el único enemigo es doña Rosa, su suegra, que tiene la manía de decir la última palabra en todo. Un día solicita la concesión de un Seat 600, pero para comprarlo tendrá que prescindir de su colección de sellos y cumplir las condiciones que le propone su suegra, si quiere que ésta le ayude a conseguirlo.