Es uno de los últimos partidos que Ōtani jugará, por lo que Risa decide apoyarlo, preparándole unos limones en "salsa de soja" (realmente son limones en miel). Al llegar el gran día, Ōtani se acobarda, pues el equipo contrario es el actual campeón. Risa lo golpea, con lo que Ōtani reacciona y juega un gran partido. Finalmente Risa le entrega su "preparación" y Ōtani le confiesa que ella es sumamente importante para él... cosa que Risa no escucha, pues se queda dormida sentada, al haber estado toda la noche preparando un afiche para apoyar a Ōtani.