Yeon Hwa se postula para trabajar en Cosmeticos J, la empresa del padre de su novio, Yoon Jae, sin embargo por cuestión del destino también labora su crúel hermanastra, Yoo Ra, quién no la soporta ni un tanto. Yeon Hwa recibe una llamada de unos susureros que tienen a Soo Ae. Yeon Hwa sale en busca y se vuelve a encontrar con su hermanastra, quién intenta detenerla.